viernes, 21 de junio de 2013

Sin limites

Por: Edgar Bucio


Estamos de fiesta, ya que el 21 de junio se celebra el día internacional de la música en varios países del mundo, se dice que esta fecha tiene relación con el solsticio de verano en Francia, donde se decretó por primera vez en 1982, por el ministro de cultura de aquel entonces.
En el Deshuesadero de Palabras quisiera festejarlo haciendo mención de aquellos que aún teniendo alguna discapacidad física, derivada de algún accidente, de nacimiento o por enfermedad han dejado huella en el ámbito musical.
El 5 de enero de 1932 se estrenó en Viena uno de los conciertos para piano más bellos que he escuchado, fue estrenado por el pianista Paul Wittgenstein, “Concierto para la mano izquierda en re mayor “ de Maurice Ravel. Wittgenstein era un pianista virtuoso desde muy pequeño, en 1913 fue reclutado por el ejército para participar en la primera guerra mundial donde, por desgracia perdió su brazo derecho, motivo por el cual Ravel le comisiona este concierto. Existen otros casos en la llamada música clásica similares. No podemos dejar de mencionar a Beethoven de quien se dice compuso la novena sinfonía estando completamente sordo, o Joaquín Rodrigo, compositor español de obras como “El concierto de Aranjuez”  y “Fantasía para un gentil hombre” , entre muchas otras, que era ciego, condición que tenia desde muy pequeño.
Django Reinhardt, guitarrista gitano principal exponente del gipsy jazz, perdió la movilidad de sus dedos meñique y anular de la mano izquierda a causa de quemaduras que le provocaron la rigidez de los tendones de dichos dedos, cosa que no le impidió desarrollar una técnica única para la ejecución de la guitarra.
Ya en una época mas actual podemos mencionar a Ray Charles y Steve Wonder, invidentes, Rick Allen, Baterista del grupo Def Leppard quien perdió un brazo en un accidente automovilístico, sin embargo continúo con su carrera haciendo adaptaciones a su batería.


Vaya pues para estos músicos que han dejado un gran ejemplo de dedicación y al mismos tiempo nos confirman que no hay limites para alcanzar las metas, un aplauso, celebrando el día internacional de la música.






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